Marcela Isarra: “Por supuesto que no vamos a avalar la toma de tierras”
Después de lo ocurrido la semana pasada con el desalojo en el barrio Santa María, el tema del acceso a la vivienda volvió a tomar cuerpo en la discusión pública. La secretaria de Gobierno describió el complejo panorama que se vive en Ramallo. A los sectores más vulnerables que históricamente reclamaron terrenos, se suma en este tiempo aquellos que, aun con trabajo, están con dificultades para hacer frente al pago del alquiler. En ese contexto y teniendo en cuenta que el municipio no tiene mucho para ofrecer, “hoy, esa solución, la tiene el Concejo Deliberante acompañándonos con su voto para comprar ese inmueble”, dijo en referencia al proyecto para adquirir lotes en Valle de Oro que la oposición mandó a comisiones para su análisis.
Muchas de las familias que fueron desalojadas el viernes del barrio Santa María (La Laguna) se alojaron en la Casa de la Memoria (galpón de estación de trenes). “Estuvimos acompañando y asistiendo el día sábado que fue cuando plantearon que se iban a quedar allí en ese lugar de la estación; nosotros, desde el Gobierno, pensando que hay niños y niñas, no podíamos ser indiferentes y pensar que pudieran pasar una noche con las condiciones del clima que están y estaban en ese momento”.
Son aproximadamente 40 personas. “Hicimos nuevamente un censo mirando que familias eran, siguen siendo las mismas familias de Ramallo, familias de apellidos históricos del barrio Santa María, vecinos históricos de ese barrio”, agregó.
La secretaria de Gobierno aprovechó la charla para dar a conocer una alerta relacionado con la vivienda. “La cantidad de personas, de vecinos y vecinas, que se están acercando hasta el área de Desarrollo de la Comunidad planteando que ya no pueden pagar el alquiler. Esta es una cuestión a mirar, revisar y rever, y por eso se empezaron a agudizar las acciones tendiendo a garantizar el acceso a la tierra como un derecho, porque la situación económica nacional, que no escapa a nadie, nos está marcando que no solo hay familias que la están pasando mal, que no comen o comen salteado, sino que ahora se les aparece esta nueva condición que un alquiler que antes pagaban 50 o 60 mil pesos, hoy lo están pagando el doble o el triple”.
“Son familias que tienen trabajo por hora o hacen changas, albañiles, mujeres en trabajo domiciliario, niñeras, son familias con ingresos muy escasos que a duras penas les alcanza para pagar ese alquiler y ahora se agudiza con esa situación económica: o pagan el alquiler o comen. Por supuesto que no vamos a avalar la toma de tierras, eso es lo que estamos trabajando para evitar ese tipo de situaciones”.
Sobre la problemática del acceso a la tierra en Ramallo, explicó. “Hay un registro histórico, lo estábamos depurando, por si hay gente que pudo acceder a una vivienda, había más de 1000 familias que estaban en la búsqueda de acceso a la tierra. Estamos hablando de un sector de la población más vulnerable, pero hay otros sectores con dificultades, pensemos también en docentes, trabajadores municipales, policías, en todo el sector asalariado que también está teniendo ese problema; no solo los sectores más vulnerables que son los que más rápido vienen y piden ayuda al municipio, sino todo el sector asalariado. El municipio tiene que ver todo ese conjunto, no solo los más vulnerables, estamos hablando de un número muy importante de familias”.
El banco de tierras municipal “es finito, escaso, lo que se ha podido tener u obtener como una base de tierra del Gobierno provincial queda muy poco”. La solución no es sencilla. “Queda la decisión política del Gobierno provincial que pueda invertir en un plan de viviendas, que yo lo veo muy complejo, no por eso no lo vamos a seguir gestionando”.
Relacionado con la falta de tierras, el Ejecutivo quiso aprobar un proyecto para comprar unos terrenos en el barrio Valle de Oro, pero la oposición decidió enviarlo a las comisiones para analizarlo. “Nosotros somos muy respetuosos de lo que cada concejal y concejala decida”. Pero, ”creo que tendríamos que despojarnos de algunas cuestiones partidistas y mirar el conjunto, hay familias que hoy están en una situación compleja, el tema de los alquileres (dificultades para pagarlo), sumado a ésto, las familias que ya sabemos que están en la calle que son estas del desalojo. Ese me parece que es el eje que tenemos que trabajar”.
“Acá no hay nada para ocultar, nada para esconder, sí sabemos que la necesidad que tenemos de proveernos de tierra para dar solución a las familias de Ramallo, hoy, esa solución, la tiene el Concejo Deliberante acompañándonos con su voto para comprar ese inmueble”.
Por último, se refirió a la compleja negociación paritaria. “Nosotros fuimos muy claros en la posibilidad que hoy tangible y concretamente tenemos, porque la responsabilidad política que tiene este gobierno también es generar obra pública, también es trabajar adentro del hospital como lo estamos haciendo, también es contribuir con la educación, con la seguridad, no solo darle las mejores condiciones de trabajo y el mejor salario a nuestros trabajadores y trabajadoras municipales”.
