Mariela Palacio, la ramallense que compite en roller urbano
Como nadie enseña ese deporte en Ramallo, viaja algunas veces por semana al barrio Somisa de San Nicolás donde se prepara para las competencias con un grupo de patinadores y el profesor Jorge Pelliza. Para su sorpresa, la primera vez que se presentó en una prueba de 6 km en Olavarría la ganó; la segunda fue hace pocos días en Villa Allende (Córdoba) y en la de 12 km terminó en el puesto 23ro entre 90 chicas de su categoría.
Ramallo se destaca por la cantidad, buen nivel y variedad de sus deportistas. Mariela Palacio es un fiel reflejo de esa peculiar característica que tiene el partido. El roller urbano libre utiliza la técnica del patín carrera (corren en óvalo), pero las competencias son en calle; las distancias pueden ser de 6, 12, 21 y 42 kilómetros.
Ella empezó con patín artístico de muy chica, cuando apenas tenía 7 años, y de grande le picó la curiosidad por esta actividad que en su momento se enseñaba en el playón de Villa Ramallo, pero como el grupo se disolvió, ahora viaja a San Nicolás para seguir ligada a su pasión.

El entrenamiento no abarca solamente andar en roller por alguna calle desolada dos o tres veces por semana, también requiere de otras exigencias. “Ir al gimnasio, tengo mi PF que es Leo Storti, me recontra ayuda a tener fuerza en las piernas, otras veces salgo a correr, porque es un deporte que, cuando una se pone a hacer todos estos kilómetros, hay que tener fuerza y resistencia; además de eso, por supuesto cuidarse con la alimentación”, dijo la protagonista en una entrevista con radio Meta.
El próximo desafío de Mariela será el 6 de mayo en Bella Vista; será la primera vez que corra en un óvalo. Para correr se necesita casco (obligatorio), rodilleras, codilleras y los rollers o botín carrera. “No son baratos, los patín carrera, las botitas, en su mayoría están en dólares, nosotros nos bancamos todo nosotros: enterito, que es muy parecido al que usan en ciclismo, los patines, viajes, todo…”
Se vino satisfecha de Córdoba y cree que tiene más para dar. “Estuve bien parada, me posicione bien, creo que estoy para mucho más, me apasiona, me gusta mucho la velocidad, esa adrenalina que te da la alta velocidad, porque vamos a 28 o 30 km, los varones a más todavía, tengo que seguir metiéndole”.